26 Abril 2014

Bateo de Oro

Arroyo Fresnedoso

 

Esta vez ,no hubo madrugones.Fuimos citados a las 11.30h en la gasolinera a las afuera de La Moraleja y ahí estuvimos todos como clavos, a pesar de alguna que otra dificultad.
Nada menos que 40 participantes repartidos entre no sé cuantísimos coches ,partimos en fila india tras el de Iñigo,nuestro director de excursión, que nos llevó a las cercanía del Arroyo Fresnedoso,proporcionándonos aparcamiento seguro,al abrirnos la cancela de la finca del dueño apalabrado.
Como locos,bajamos de los coches,nos calzamos las botas,algunos,y nuevamente en fila india ,esta vez a pie,atravesamos por un túnel la carretera,para desembocar en la finca ,que cruzamos ,en perfecta fila,para no pisar los pastos de las cabras,hasta llegar a la orilla del rio.
Los conocedores del Bateo,cogieron sus aperos ,sus concesiones y comenzaron a batear y extraer las microscópicas pepitas a toda velocidad,mientras Los Novatos escuchaban atentamente la Lección Magistral acerca de los aluviones de oro de la zona y la técnica del bateo impartida por Iñigo,que dejó a todos embobados y al mismo tiempo,sabios en la materia.
El tiempo,se comportó.Llovió algo en el trayecto,pero en el río,ni gota,había suficientes,e incluso en la tarde,salió el sol ,que casi sobraba.
El campo,”florido y hermoso”,el rio caudaloso,familias con niños,participantes de primera,pepitas de oro a cada paso.¿Qué mas podíamos pedir?.
Con la “Fiebre del oro” que nos invadió ,nos perdimos el disfrutar todos juntos de una perfecta comida campera y cada uno comió según necesidades.Ahora sí,de nuevo en fila y por turnos, con la disculpa de agradecer al dueño de la finca su comportamiento,nos hinchamos a comprar sus quesos de cabra que por cierto,!Como estan!
Los coches fueron de vuelta ,también,según necesidades ,por lo que junto a la “Fiebre” del oro y tanto queso,no pudimos despedirnos uno por uno,como hubiéramos deseado.